Barcelona tiene muchas cosas buenas, pero cuando llega el calor, las playas se convierten en el salón de la ciudad. Bueno, un salón lleno de turistas, olor a crema solar, gente vendiendo mojitos ilegales y alguien tocando el ukelele a tres metros de tu siesta. Aún así, hay algo mágico en estas playas urbanas que mezclan chiringuito con locura. Aquí te dejo las más famosas (y un par de secretos que huelen a salitre y aventura).
Barceloneta: la playa de todo y de todos
Barceloneta es la reina madre de las playas de la ciudad. Aquí encuentras de todo: grupos de italianos jugando a las palas, señoras que se meten al agua con gafas de sol puestas, y skaters que parecen salidos de TikTok. También está llena de guiris rojos como cangrejos, vendedores de “Cerveza-beer-agua” y familias locales que llevan la tortilla en un tupper tamaño industrial.
La arena no es la más fina del mundo (más bien parece pan rallado grueso), pero tiene su encanto. Y el mar… bueno, el mar está ahí, a veces azul, a veces sospechosamente verde. Pero te lo pasas bien, eso sí. Aunque te quemes las plantas de los pies cruzando desde la toalla al agua.
Bogatell: el lado zen (si vas temprano)
Bogatell es como la hermana cool de la Barceloneta. Más tranquila, más limpia, más espaciosa. Aquí hay menos gente vendiéndote cerveza y más gente leyendo libros con aire interesante. Si vas pronto, tipo 9 de la mañana (raro en ti, lo sé), puedes tener medio paraíso para ti solo. Pero si vas a las 12:30 en julio… bueno, prepárate para jugar a “encuentra un hueco entre toallas”.
También es la favorita de runners, yoguis, y gente que dice “vamos en bici” para luego ir en patinete eléctrico. Tiene buena vibra, duchas decentes, y un chiringuito que pone hummus con nombre poético.
Nova Icaria: chiringuito, vóley y papas bravas
Si buscas una playa con ambiente de grupito feliz y muchas redes de vóley, Nova Icaria es tu sitio. Aquí la gente va con ganas de pasarlo bien, pero sin el estrés de parecer influencer. Hay guiris, pero también muchos locales. Las partidas de vóley son legendarias. A veces te dejan jugar, a veces no, depende de si llevas gorra para atrás o no.
Los chiringuitos aquí tienen bastante nivel. Tapas, cerveza fría, y sillas que no se hunden en la arena (esto es más importante de lo que crees). El agua suele estar decente, y si no lo está, pues te quedas en el chiringuito que tampoco está mal alquiler limusinas barcelona..
Mar Bella: libertad, color y algún que otro desnudo inesperado
Ah, Mar Bella. Aquí la cosa se pone interesante. Es la playa de la diversidad, del espíritu libre y del “haz lo que quieras, nadie te juzga”. Hay zona nudista, zona LGTBIQ+, zona de colchonetas inflables gigantes y zona de gente que simplemente quiere estar donde haya buena música.
Si te gusta el ambiente relajado y no te molesta ver un señor leyendo el periódico completamente en bolas, este es tu lugar. También hay rampas de skate cerca, bares con DJ y algún artista callejero que parece que vive en la playa directamente.
